Creo que fué en 1996 cuando ví por primera vez esta película en los cines Verdi de Barcelona. Recuerdo especialmente aquel día porque eramos sólo tres o cuatro personas en la sala, y porque al finalizar la película tuve la sensación de que algo había ocurrido en mí, esa película me había impactado, quizá era la edad, quizá no estaba preparada...para recibir tanta soledad en un sólo golpe, la sensación del absurdo existencial, como diría Emil Cioran 'En las cimas de la desesperación' .... años después compré el libro, con la intención de profundizar más en aquella soledad...en aquel viaje de destrucción, también personal ... un viaje sin equipaje, para ir lejos...
Nunca unas imágenes dijeron tanto, de la mano de Angelopoulos 'Es la búsqueda de la mirada del otro pero, en el fondo, es la búsqueda de la mirada de uno mismo'.
