


Didier Belondrade, un apasionado de España, llegó a La Seca en 1994 con la intención de trasladar su sabiduría Borgoñesa a la variedad verdejo. Buenas dosis de 'savoir fair', mucho entusiasmo y un equipo entregado en cuerpo y alma han hecho de BELONDRADE y LURTON una de las bodegas más interesantes del panaroma vitivinícola español.
El viernes pasado estuve visitando la bodega con Marta Baquerizo, la enóloga, alma de los caldos. Una excelente profesional y mejor persona que ha sabido poner un sello de autenticidad a estos tres vinos, entendiendo el mensaje que el propietario del bodega quería dar a su proyecto. Precisión, minimalismo y calidad.
El viernes pasado estuve visitando la bodega con Marta Baquerizo, la enóloga, alma de los caldos. Una excelente profesional y mejor persona que ha sabido poner un sello de autenticidad a estos tres vinos, entendiendo el mensaje que el propietario del bodega quería dar a su proyecto. Precisión, minimalismo y calidad.

La Seca. Rueda.